La eólica es una de las muchas historias de éxito en el desarrollo renovable. Con una implantación gradual, esta tecnología ha generado una importante industria nacional a la vez que ha reducido significativamente sus costes de generación.
Hasta el año 2013, en el que se estancó la implantación de tecnología eólica en nuestro país, la fuerza del viento se ha ido integrando con éxito en nuestro sistema eléctrico. En la actualidad, hay más de 23.000 megavatios conectados a red que, en 2016, generaron el 17,8% de la electricidad consumida en España.
Adicionalmente a la industria generada y la electricidad producida, la eólica ha conseguido uno de los grandes logros de las renovables a nivel mundial: con una reducción de costes del 66% en los últimos 7 años hoy es competitiva frente a formas de generación contaminantes.