Info Renovables 03/2020- Editorial: Anticipándonos a un pool renovable

Info Renovables 03/2020- Editorial: Anticipándonos a un pool renovable

La mejor noticia de los últimos años en lo referente al desarrollo renovable podría ser, perfectamente, la demostración de su competitividad económica. Esto ha permitido que los objetivos marcados de cara a 2030 se hayan vuelto más ambiciosos y que la imagen de estas energías haya cambiado muy favorablemente. Sin embargo, también ha supuesto que los nuevos proyectos, especialmente los desarrollados durante el último año, se hayan hecho más dependientes del precio de mercado.

Una de las grandes críticas que tenían las energías renovables era que deberían competir en igualdad de condiciones. Resultaba curioso escuchar esto de sectores que no tenían problema en competir en un mercado liberalizado pero que, al mismo tiempo, ignoraban las externalidades negativas, el impacto necovidgativo que suponía para nuestro país depender de importaciones o, cuando era necesario, reclamaban pagos por capacidad innecesarios en nuestro sistema eléctrico.

Al alcanzar la competitividad económica, las tecnologías que ya no necesitan un complemento al mercado se han hecho totalmente dependientes de este. Y comportamientos del precio del pool como el que hemos vivido en los últimos meses, donde hemos visto como en mayo dábamos las gracias por “superar” la barrera de los 20 €/MWh, hacen que tengamos que ser especialmente vigilantes sobre las reglas de mercado y cómo afectan a nuestro sector.

Cuando en febrero se publicó la Orden de Parámetros y desde APPA Renovables levantamos la voz para denunciar unos precios a futuro alejados de las previsiones, la Asociación se quedó sola en sus reivindicaciones. Aunque ahora pensemos que el escenario de la pandemia es transitorio y los precios volverán a subir, es importante recordar que la Orden fijaba en 54 €/MWh el precio previsto para este año. Pensar, siquiera, en un precio medio de 40 €/MWh para 2020 se antoja descabellado si pensamos que, en enero y febrero, antes de que nos afectara el COVID, el precio medio mensual fue de 41,1 y 35,9 €/MWh.

Es el momento de revisar este dato de la Orden, la periodicidad con la que se revisa, eliminar las bandas muertas y acometer la actualización de los costes de combustibles – que afecta a renovables como biomasa o residuos –, dado el carácter excepcional de estos tiempos. Pero también es el momento de abordar el futuro de unas tecnologías que, por su mayor peso en los próximos años y sus diferentes características, debemos garantizar cómo casan en nuestro modelo. Excedentes, apuntamiento, vertidos… Todo esto lo deberemos analizar, porque estamos planteando incorporar más de 50 GW de potencia renovable en la próxima década y nos tenemos que anticipar a su efecto para poder hacer una Transición Energética ordenada y dar visibilidad a los inversores sobre el retorno de sus proyectos.